La actividad física constituye un factor que puede tener efectos beneficiosos sobre la salud.Existen estudios  clínicos, referidos a la influencia del ejercicio físico sobre la funcionalidad inmunitaria. Los resultados indican que dependiendo del tipo de ejercicio, la función inmunitaria estudiada y el estado del individuo van a ser los resultados que obtendremos. Se sabe que el ejercicio muy intenso induce una reacción inflamatoria acompañada de la activación o la inhibición de las funciones de determinadas células inmunocompetentes, mientras que el ejercicio moderado permite la adaptación del sistema inmunitario y mejoras sus funciones. Por lo tanto, la actividad física no debe ser vigorosa para tener efectos beneficiosos sobre la salud y especialmente sobre el sistema inmunitario.El ejercicio físico intenso puede causar estrés oxidativo porque incrementa el consumo de oxígeno molecular en la respiración y puede generar grandes cantidades de radicales libres de oxígeno (ROS). A demás  se acompaña de la implicación de las células inmunitarias, especialmente las células fagocíticas, a través de la generación de oxidantes. En consecuencia, una sobre estimulación de la respuesta inmunitaria innata podría ser perjudicial en individuos con un estado inflamatorio elevado.

Por el contrario, en respuesta al ejercicio repetitivo y gradual disminuye el estrés oxidativo y aumenta la resistencia al daño oxidativo. Este hecho podría ser debido a que el ejercicio induce cambios en enzimas antioxidantes no sólo en el músculo esquelético, que es la principal fuente de radicales libres, sino también en otros tejidos y células.

«La actividad física influye sobre la funcionalidad inmunitaria. El ejercicio moderado, repetitivo y gradual parece aumentar las defensas antioxidantes, mientras que el ejercicio intenso o extenuante genera gran cantidad de compuestos oxidantes y activa la inflamación» (Castell M & Pérez FJ, 2014).

«Se puede postular que la actividad física moderada puede disminuir la velocidad del proceso de envejecimiento a través de la recuperación del balance entre oxidantes y antioxidantes de las células inmunitarias y la disminución de la inflamación».

Beneficios del ejercicio en el sistema inmunológico

El ejercicio es parte del tratamiento de múltiples enfermedades crónicas
Además de mejorar el estado metabólico también tiene efecto en el sistema inmunológico. Los cambios van a depender de la intensidad del ejercicio y el tiempo de entrenamiento.La recomendación para fortalecer el sistema inmunológico siempre va ser primero la actividad fisica y segundo la buena alimentación.